¡Hola Mimbreros!
Ante todo pedir disculpas, sé que prometí escribir los domingos, pero últimamente me resulta un poco difícil, pues entre las clases de baile y los ensayos de después para una actuación que más tarde comentaré... es prácticamente imposible sacar tiempo para esto, pero buscaré otros ratitos de inspiración como el de ahora para ir actualizando este pequeño pedacito de mi mundo que comparto con vosotros, palabra.
Tengo tantas cosas que contar en esta crónica que no se ni por dónde empezar...en fin, vamos a intentarlo.
Primera buena noticia de estas enorme y vergonzosa ausencia virtual: he recibido las notas de varias asignaturas ¡y he aprobado todo!, increíble pero cierto, incluso en una de ellas tengo un 7'5, aún no me lo creo, debe ser que esto del periodismo es lo mío, jeje, además de acudir hoy a una rueda de prensa en La Casa Encendida de Madrid sobre la ecología que trataba básicamente sobre vehículos ecológicos en la que se encontraban personalidades como Ana Botella (ya lo he dicho, empezamos pisando fuerte, con personalidades conocidas y todo, jajaja).
Segunda buena noticia: Hará cosa de tres viernes, mi profesora de baile me ofreció actuar en un acto benéfico a favor de la Cruz Roja, a lo que acepté encantada, ya sabéis que el baile es una de mis grandes pasiones, pero lo que se la olvidó comentar es que mi primera actuación en público (si, porque esta es la primera actuación que voy a hacer) iba a ser por la puerta grande, nada más y nada menos que delante de la friolera de 11000 personas que acudirán en el mes de Febrero (fecha concreta aún por determinar) a un estadio de baloncesto solo para vernos bailar a mi grupo y a mi. Así que sí, estoy asustadísima, pero muy emocionada, por ahora los ensayos van muy bien, mi papel es pequeñito, pero de seguro no pasaré desapercibida... jajaja, ya os comentaré cómo salió la broma...
Y tercera buena noticia: el día 11-11-11 (tiene tela la fecha...) me sucedió algo inesperado... con la lluvia de Noviembre el amor volvió a mi puerta. Si amigos, otra vez estoy suspirando por las esquinas por una persona que me ha cautivado con, como yo le digo, sus ojos de halcón, sobrenombre que utilizamos para dedicarnos algún detalle por las muchas redes sociales que ambos usamos para no decir directamente quién es, pues todavía no queremos que se sepa con certeza porque hay personas que complican un poco el poder decir libremente que estamos felizmente emparejados, aunque nuestro círculo más cercano ya son conocedores de este hecho. Sé que es pronto para decirlo, pero creo que con él conseguiré ser feliz, pues parece beber los mares por mi de forma plena y sincera sin pedir nada a cambio, aunque intento siempre compensarle del mismo modo. Me gustaría hablar largo y tendido sobre ésto, pero como he dicho antes, no puedo, por lo que tengo que terminar este apartado con dos palabras: TE QUIERO.
Ya veis... soy feliz, la vida me sonríe y poco más puedo decir... solo rezar porque no cambie mi suerte y me vea en las de siempre... ¡Cruzad los dedos por mi!
Y como le debo mucho a la lluvia de Noviembre... ¿adivinad qué canción voy a poner esta vez? jajaja, ¡disfrutarla y besitos de mimbre!
Estimada amiga:
ResponderEliminarGracias por atender mi petición de ayer. Sé que estás muy ocupada, pero me congratula comprobar que no has perdido las ganas de seguir escribiendo tus hazañas.
Además, también me alegro de que te vaya tan bien en tantos aspectos de tu vida. Es bueno comprobar que la gente de bien acaba recompensada.
Espero que podamos seguir disfrutando de tu presencia y buen hacer en este medio.
Un afectuoso saludo de un lector venenoso.
Querido lector:
ResponderEliminarAnte todo, ¡gracias!, realmente pensé que mi labor quedaría solo para mi desarrollo personal sin tener repercusión ni seguimiento alguno. Agradezco cada una de sus palabras y que siga cada entrada publicada en este pedacito virtual de mi mundo además de su comprensión respecto a mi situación actual Así, deseo de todo corazón (de mimbre, por supuesto) que tenga paciencia, pues intentaré continuar con el mantenimiento de este blog en medida de lo que me sea posible, le aseguro que desearía que los días tuvieran 30 horas para hacer todo cuanto quiero. También quisiera pedirle que colabore tanto como desee para hacer de este blog un sitio mejor, por tanto, no deje de comentar todo cuanto se le pase por la cabeza dando su opinión, proporcionando ideas o sugiriendo novedades de cualquier índole.
A su vez, espero que no le caiga ningún piano en la cabeza cuando llueva allá por donde habita el olvido, mas sea mojado por la lluvia de Noviembre de la misma forma que lo he sido yo, consiguiendo ser feliz.
Le mando un fuerte abrazo y algún que otro beso de abuelita, pero de los que tienen chispa y brillan en la oscuridad, desde los dedos tecleantes y la mente pensante de Otro Corazón de Mimbre.